6.- BORDES, CONTORNOS Y ESPACIOS EN NEGATIVO

En dibujo nunca hablamos de bordes sino de contornos.  Los contornos de los objetos están formados por trazos: líneas rectas, ángulos y curvas independientemente del objeto que estemos observando (y dibujando) y lograr percibirlos así, es uno de los objetivos de este curso de dibujo y pintura.. Probablemente es el objetivo fundamental. 

Cuando consigamos ver (como los artistas) exactamente igual una cara, un modelo desnudo, un niño o un jarrón (cuando veamos solo líneas y trazos de contornos) de pronto nuestros retratos y nuestros dibujos se  parecerán como gotas de agua a nuestro modelo y nuestros dibujos cobrarán vida.

Un contorno siempre está compartido entre dos partes de nuestro modelo, de hecho el contorno es el lugar común en el que se encuentran dos partes de la figura.

Pongamos un ejemplo con nuestra propia mano que ya hemos estado dibujando varias veces:

Los contornos 2 y 4 están compartidos entre dos dedos (y los delimitan y dan forma) y entre un dedo y la palma de la mano. Los contornos 3, 6 y 7 son las "líneas de la mano", donde dos pliegues de nuestra carne se unen para formar una arruga. La unión de la uña con la carne es también un contorno compartido, aunque en esta posición de la mano no resulta visible. 

Por último los contornos donde la mano se encuentra con el aire (que son los que antes llamábamos "bordes") forman en realidad figuras con el recuadro de la imagen; son los "espacios en negativo", es decir son también formas y hay que dibujarlas como tales. 

Como no percibimos (aún) estos recuadros de la imagen cuando pintamos del natural, una de nuestras próximas tareas consistirá en recortar un "marco" o recuadro de cartulina negra ó mejor aún, gris neutro, para encuadrar a través de él nuestros modelos y percibir este límite cuadrado que delimita nuestra imagen, y que al dibujar constituye el contorno exterior del papel (su "borde").

Aquí hemos dibujado únicamente el "espacio en negativo" que se forma en  la parte superior izquierda de la fotografía de la mano anterior. Cuando se dibuja la mano, este espacio triangular se dibuja también como si fuera una "figura sólida" que compartiría su contorno con otras partes de la figura y con el contorno que delimita la imagen.

Estos dos conceptos de contornos y de espacios en negativo son fundamentales en el dibujo (y en la pintura).

Cualquier contorno compartido, se describe (y por lo tanto "se dibuja") como una sola línea y el artista únicamente tiene que apreciar las elegantes curvas que lo delinean y conforman; cada forma de nuestro modelo puede así dibujarse trazando sus contornos.

Según vamos creando nuestro dibujo mediante el trazado de los contornos de todas las partes que forman el modelo, cada una de ellas "encaja" con aquellas con las que comparte contornos como las piezas de un rompecabezas, y la imagen de pronto se "unifica" manteniendo unas proporciones perfectas.

Vamos a insistir un poco más en este concepto de "formas unificadas" que comparten contornos y que "encajan" para formar la figura total: Probablemente uno de los mejores ejemplos para visualizarlo  son estos rompecabezas ó puzles de madera con los que jugábamos en nuestra infancia y que podemos ver en la imagen adjunta.

Únicamente cuando todas las piezas están juntas y "encajadas", es cuando podemos ver la figura terminada: el barco o el coche en las imágenes anteriores.  

Ahora vamos a intentar visualizar cada pieza del rompecabezas del barco de modo independiente:   

Si separamos y extendemos estas piezas por la mesa, nuestra figura desaparace: Ya no hay "barco" ni  "velas", ni "cielo" ni "agua", son simplemente formas delimitadas por contornos compartidos con otras piezas y con el límite cuadrado que enmarca la figura completa.

En este rompecabezas del barco, las dos piezas del cielo son "espacios negativos", tan "sólidos" (son de madera) como las velas o el Sol.   Las "velas" no son tales sino formas con tres lados rectos.

 

Todas  son "piezas" que encajan para formar la figura final y todas, incluso las formadas por "aire" (los espacios en negativo: las dos piezas azules del cielo) son igual de importantes y necesarias para que encajen junto con las demás y formen la imagen unificada final.

Cuando cada forma delimitada por contornos encaja con todas las demás se consigue de pronto la "unidad" en toda la imagen y el dibujo está terminado y perfecto.

Son conceptos que ya estamos escuchando en las clases, y que ahora por escrito nos ayuda a entender y a continuar con el maravilloso paseo que estamos realizando hacia el dibujo y su técnica.